Me odio por amarte y por la debilidad que así mostraba,solo eras un rostro pintado viajando por la senda del suicidio.El escenario estaba puesto,las luces se apagaron en el viejo hotel.Me odio por amarte y me alegra que haya caído el telón.Odio esa estúpida farsa y la necesidad que revelaba y la piedad que me mostraste,¿quién lo hubiera adivinado?,anduve por el bajo Mar del Plata y sentí dentro de mi el hueco donde sollozan los mártires y los ángeles juegan con el pecado.He oído tus cantos de libertad sobre el hombre despojado que interpreta su locura mientras le azotan la espalda como un esclavo en órbita,lo golpean hasta la mansedumbre,todo por un estado de gloria,una putrefacta vergüenza.
Algunos adoran la soledad,yo no soy uno de ellos.En este tiempo de plástico busco una piedra preciosa,la bola de cristal no muestra nada en el muro,he pagado el precio de la soledad,pero la menos no tengo deudas.No recuerdo nada útil que hayas hecho por mi,salvo una palmada en la espalda cuando estaba de rodillas.Nos mirábamos a los ojos hasta que uno aflojaba,no hace falta disculparse¿de qué serviría?
Así que canta al progreso y a la maquina del apocalipsis,la verdad desnuda es aún tabú cuando esta a la vista.La diosa Fortuna,que brilla sobre mí,te dirá por donde ando....
Me odio por amarte,pero ya lo superaré...